Un destino de ensueño para todo tipo de perfiles y en el que sentirás que nunca tienes el suficiente tiempo para verlo todo, vamos a proponer un itinerario sobre qué ver en Argentina en 15 días, como siempre, bueno, bonito y barato.
Ten presente que Argentina se extiende a lo largo y ancho de casi 3 millones de km2 y a lo alto de hasta 7.000 msnm -Aconcagua-, por lo que es muy difícil verlo todo, sobre todo cuando tienes poco tiempo. Aun así, es un país al que siempre prometes volver, porque concentra una diversidad de culturas, paisajes, ecosistemas y maravillas del mundo que se te clavan en la retina y te acompañan de por vida.
De hecho, fue en este país cuando se germinó la idea de coger la mochila de manera indefinida. Montañas de colores, glaciares, cataratas que se traga la tierra, salinas… Argentina es un caleidoscopio de parajes increíbles que sacian las exigencias de incluso los viajeros más experimentados.
Es un destino que personalmente me ha atraído, no solo por los versos de Sabina, sino por razones gastronómicas, ambientales, históricas e incluso musicales. Más allá del tango, Argentina es de los países latinoamericanos que condensa una mayor variedad musical: géneros como la cumbia(villera), carnavalitos, milonga y su particular rock argentino, que consumo con mucha asiduidad y que me empujaba a conocer su pampa original.
Roqueros, carnívoros, intelectuales, poetas, filósofos, revolucionarios… Hay una Argentina para cada uno de nosotros. Así que propongamos una guía sobre qué ver en Argentina en 15 días que pueda servirnos como primera toma de contacto con este maravilloso país. Y pronunciar la inquebrantable promesa de volver.
Cosas a tener en cuenta antes de viajar a Argentina
Visado
Desde países Europeos no necesitas ningún visado de turismo. Eso sí, deberás tener una reserva o la información de tu hospedaje y, eventualmente, te pedirán mostrar tu salida del país. Esto no siempre lo piden pero es importante que tengas un billete de salida del país antes de los próximos tres meses desde tu llegada por evitarte quebraderos de cabeza. Puede ser un bus desde ciudades como Mendoza o Calafate por tierra o un avión barato a Chile, o un barco a Montevideo. Lo que se te ocurra que sea muy barato ya que solo será para mostrar en la aduana al aterrizar.
Si tu viaje es de ida y vuelta por la misma vía y está dentro de esos 90 días, no tendrás problema.
Cómo llegar a Argentina
Puedes llegar por tierra, mar y aire, de tu lugar de procedencia dependerá qué vía de transporte se ajusta mejor a tus circunstancias. Si vienes de Europa, llegarás por avión al aeropuerto internacional de Buenos Aires. Recuerda que para conseguir vuelos baratos puedes crear alertas en webs como Skyscanner, navegar en incógnito o el truco infalible para hacerte con billetes de avión más baratos: el VPN.
Es un viaje muy largo así que, si lo que te ahorras no es mucho, recomiendo fervientemente volar directo a la capital y evitar tediosas escalas. Una vez llegues a Buenos Aires vas a moverte al resto del país desde ahí, así que si tu idea es empalmar alguno de tus vuelos internacionales con nacionales es muy importante que sepas que son dos aeropuertos distintos y que se encuentran a gran distancia. Las salidas y llegadas internacionales se hacen desde el Aeropuerto Ezeiza, a unos 40 km de la capital, y las nacionales los tomarás desde el Aeroparque Jorge Newbery, en la costanera de la capital. Por lo que si pretendes combinar algún trayecto, ten en cuenta que el desplazamiento entre uno y otro te llevará bastante tiempo.
Dinero y tarjetas
El euro es fuerte y una vez que llegues no tendrás problema para cambiarlo. Sin embargo, te recomiendo que cambies un poco en el aeropuerto y que el resto lo cambies en el centro de Buenos Aires, en la calle Florida, donde las oficinas de cambio te ofrecen una mejor tasa.
También puedes cambiar en la calle, esto es, con menos garantías pero te compran los euros/dolares a mejor precio. Esto es una decisión personal, yo lo he hecho, guíada por amigos locales y estiré los euros bastante, pero si no conoces bien, puedes ser víctima de alguna estafa. No es lo habitual, pero debes estar atento y comprobar bien los billetes, etc.
Clima
Si te vas a mover a lo largo y ancho del país, averigua el clima que tendrás. De esta forma, tu equipaje se adecuará mejor a las condiciones meteorológicas de cada destino, como puedes leer en cómo hacer una maleta perfecta.
Las estaciones en argentina son inversas a las de Europa, es decir, nuestro verano coincide con su invierno, y dependiendo de lo al sur o norte que vayas, el clima será muy distinto. Asegúrate de comprobar esto para evitar imprevistos.
Mejor época para viajar a Argentina
Teniendo en cuenta este detalle sobre la inversalidad estacional, podemos deducir que en agosto -nuestro verano- será temporada alta para turistas europeos y americanos y los precios de los billetes probablemente subirán. Puedes probar con VPN a comprarlos desde una IP de otro país fuera de estos.
Enero y Febrero es el julio y agosto de ellos, así que si persigues calor para paliar el invierno puede ser una buena opción pero prepárate para sufrir las subidas de precio locales. Por ello, considero que lo ideal es en medio de estas fechas: de marzo a mayo y de septiembre a noviembre. Yo fui a mediados de mayo y tuve un clima bastante aceptable.
Qué ver en Argentina en 15 días
Es verdad que el sur de Argentina es más popular y llamativo que el norte, pero si eres friolero o si dispones de un presupuesto menor, el norte te va a enamorar. Así que en esta ocasión, sacaremos La Patagonia de la ecuación de qué ver en Argentina en 15 días y nos enfocaremos en el sorprendente norte.
Buenos Aires
Dependiendo del recorrido que tengamos previsto podremos dedicarle más o menos días a la capital, pero, sin duda, la incluimos en nuestro itinerario sobre qué ver en Argentina en 15 días.
Microcentro
El primer día te recomiendo que te impregnes de la cotidianidad y bullicio del centro. En la Calle Florida, su arteria principal, disfrutaras de comercios, casas de cambios y todo tipo de actividad propia del epicentro de una capital. Es común ver artistas deleitando con su música o bailes (tango sobre todo) y tienes una gran y variada oferta de cafés, tiendas de souvenirs y centros comerciales.
En esta zona encontrarás la famosa Plaza de Mayo (Escenario principal de la historia revolucionaria de este país y de estribillos de Sabina), ahí ubicas el famoso café Tortoni, conocido como el centro cultural de Buenos Aires. Al fondo tienes la casa presidencial, la casa rosada.
En los alrededores tienes la avenida 9 de julio y el famoso obelisco. Esta es la vía principal desde donde salen buses que conectan con el resto de la ciudad y va en paralelo al microcentro. Está todo relativamente cerca e esta zona, así que te recomiendo que te pierdas sin miedo y disfrutes del vaivén de la ciudad de la furia.
Recoleta
El barrio de la Recoleta es un elegante barrio residencial en el centro de la capital, popular por su lujosa y ornamentada arquitectura, de estilo francés. Es un barrio muy agradable donde perderse, aprovechar para almorzar en su vasta oferta gastrónomica y, cómo no, visitar su famoso cementerio y perderse en sus estrechas callejuelas.
Este cementerio data de principios del Siglo XIX y en el se encuentran los restos de las personalidades más influyentes de la historia argentina, como Eva Perón. Más que un cementerio, es un monumento de gran interés turístico ya que el paseo por su laberinto de pasillos, mausóleos, esculturas y otros monumentos hacen de esta visita una experiencia única y amena. Y es gratis.
Cerca puedes visitar la Iglesia del Pilar, la facultad de Derecho, el Palacio Nacional de las Artes y, cómo no, la popular estatua de acero en forma de flor: floralis Genérica.
San Telmo
Un barrio ideal, tanto para alojarse como para deleitarse con sus museos, monumentos y su gran oferta de ocio y entretenimiento, sobre todo los fines de semana. Es uno de los barrios residenciales más antiguos de Buenos Aires y que tiene un gran valor cultural.
En la Plaza Dorrego puedes impregnarte de una auténtica experiencia porteña, donde junto con los turistas, puedes ver diseños y arquitectura colonial. Además los fines de semana, la plaza central se llena de ferias de artesanía y mercados de antigüedades.
Boca – Caminito
Otro de los grandes barrios protagonistas de Buenos Aires es sin duda La Boca. Un barrio colorido a orillas del puerto de la ciudad, es famoso por las dos pasiones que históricamente han caracterizado a este singular distrito: el fútbol y el tango.
El paseo por Caminito, la cuadra que concentra las casas y tabernas coloridas propias de La Boca y que guardan una esencia artística y cultural encantadoras, es muy agradable. Sin embargo, sentí cierto desinfle al ver que todo estaba preparado para el turista. Como si al irnos los visitantes, cerraran el show. Al menos, la puesta en escena de sus cantantes y bailarines de tango me recordó a ese flamenco forzado que ponemos y cobramos para los extranjeros y que, lamentablemente, pierde encanto y autenticidad cuando lo que queremos disfrutar es de la espontaneidad de una pasión, hecha arte.
A unas cuatro cuadras de Caminito, queda el monumento para los más futboleros: el Estadio de Boca Juniors que se puede visitar por un precio de 350 pesos para turista nacional y 470 para el extranjero ( unos 5-6€).
Los alrededores del barrio no son muy seguros para el turista. Por lo que te recomiendo que no te alejes de la zona y evitar así alguna situación desagradable.
Palermo
Otro de mis barrios predilectos, tanto como para alojarme como para recorrerlo, Palermo es el barrio más grande y moderno de Buenos Aires y tiene muchas cosas para hacer. Se divide en Palermo Hollywood (por su industria audiovisual), Palermo Soho (zona gastronómica-cultural) y los famosos Bosques de Palermo, una vasta extensión de jardines y pequeños lagos al norte de este distrito.
Aquí se encuentra también el jardín botánico, cuya entrada se puede hacer desde plaza Italia, y como al igual que infinidad de cosas en Buenos Aires, es gratis. Data de 1898 y posee diferentes jardines, esculturas, fuentes, bustos y por supuesto distintas especies vegetales (hasta 1500).
Por la tarde-noche, es paseo obligado la Plaza Serrano para ver el ajetreo de turistas, estudiantes y ejecutivos que se concentran en esta zona de bares y restaurantes cualquier día de la semana. Es la zona rosa de la capital sin duda y uno de los barrios más seguros.
¿Dónde alojarse en Buenos Aires?
Desde mi experiencia, los mejores barrios para alojarse en Buenos Aires son San Telmo y Palermo. Ambos son barrios bastante seguros y bien comunicados con el resto de la capital, además de lugares con muchos comercios y gran oferta de entretenimiento. La primera vez me alojé en San Telmo, en casa de un amigo, y pude recorrer todo lo mencionado andando, excepto la Boca. Tienes la avenida nueve de julio al lado y de ahí salen buses hasta el fin del mundo. Además, como ya he comentado es un barrio bohemio con mucha artesanía y ferias de antigüedades, lo que le da un misticismo especial.
La segunda vez, no me quería perder el ajetreo nocturno de la capital y me fui directa a Palermo. Allí me alojé en el Art Factory Palermo, un concepto de urbanart hostel donde se fomenta el encuentro de viajeros de todas las partes del mundo. Se encuentra a unas cinco cuadras de Palermo Soho y, al contrario de lo que pude intuir al llegar, es bastante tranquilo y se puede descansar bien. Además es bastante económica, una cama en una habitación de cuatro, femenina, cuesta unos 450 pesos, unos 6 euros.
Puerto Iguazú
Situado a 17 km de uno de los mayores espectáculos de la naturaleza, esta localidad se encuentra en el extremo nordeste de Argentina y su mayor atractivo, como se puede intuir, son sus cataratas. Por supuesto es uno de los imprescindibles a la hora de elegir qué ver en Argentina en 15 días. Esta parte de mi itinerario la puedes leer en el artículo Cataratas de Iguazú y triple frontera.
Además, se encuentra en lo que e conoce como la triple frontera o trifinio, donde convergen Puerto Iguazú (Argentina), Foz de Iguaçu (Brasil) y Presidente Franco y Ciudad del Este (Paraguay).
Cataratas de Iguazú
Las famosas Cataratas del Iguazú están formadas por 275 saltos de agua de hasta 80 metros de altura y son consideradas una de las siete maravillas naturales del mundo. Se encuentran dentro del parque natural de Iguazú, que se extiende a lo largo y ancho de la provincia argentina de misiones y la brasileña de Paraná.
Estos saltos están repartidos en un 80% en territorio argentino y en un 20% en territorio brasileño. Lo ideal es destinar un día a cada uno de los lados. Yo empecé por el lado brasileño, y sentó una expectativa bastante alta. Desde este lado, se ven los saltos del lado argentino y son espectaculares, pero no tiene mucho más. Se trata de varios miradores donde se ven las cataratas de modo panorámico. Es decir, este lado se ve más rápido así que, si vas temprano, puedes aprovechar luego para visitar el parque de las aves.
El lado argentino es todo un parque de atracciones, para lo bueno y para lo malo. Es decir, aquí tienes varios senderos y recorridos a distintos niveles de manera que puedas ver los saltos de diferentes perspectivas, te llevará mucho más tiempo si tu idea es recorrerlos todos, algo que te recomiendo ya que pagas la entrada. Sin embargo, vas a sentirte en un Port Aventura ya que una de las siete maravillas naturales del mundo, como era de esperar, tiene mucho público deseando verlo.
Además se organizan muchas excursiones con lo que vas a notar cierta condensación de gente y un ruido impropio para un paisaje natural como este. Aun así, puedes desmarcarte un poco haciendo algún sendero, como el Macuco. Un entrañable camino de tierra en medio de la selva que termina con el Salto Arrechea y que tiene unos 7 km de longitud aproximadamente. Es un paseo bastante agradable y plano, donde puedes deleitarte con sonidos propios de la pachamama. Recomiendo coger un folleto sobre el sendero donde explica el trayecto, los animales que puedes ver y qué hacer si te los encuentras.
Pero sin duda, lo más impresionante del parque es su salto de 80 metros y de mayor caudal: la garganta del diablo. Vislumbrarla a tan solo 50 m es realmente algo impresionante. Te olvidas de los turistas y de todo. La sensación de caída de tanto volumen de agua parece como si se nos fuera a tragar la tierra. Observar la fuerza de la madre naturaleza como arrastra con fuerza este caudal de agua produce sensaciones encontradas y emociones que, al menos yo, pocas veces había experimentado. Para llegar a esta, tienes que coger su tren ecológico hasta la última parada y atravesar la pasarela donde ya empieza a salpicarte tremendo espectáculo.
Por ello, este destino es obligatorio al escoger qué ver en Argentina en 15 días
Qué debes saber antes de llegar a Puerto Iguazú
Llegada al aeropuerto
Desde Buenos Aires es relativamente barato volar a Puerto Iguazú. Son vuelos nacionales cortos y es probable que se mueva bastante ya que llegas a zona de selva: estás viendo arbolitos hasta dos segundos antes de tocar tierra. Ten en cuenta que estos vuelos salen desde el aeroparque Jorge Newbery, no de Ezeiza.
Una vez llegues, el aeropuerto es muy pequeñito y allí mismo puedes comprar el transfer al pueblo que se encuentra a unos 25 km y te dejan muy cerca de tu hotel. Es importante que guardes el número de whatsapp de esta compañía para pedir que te recojan el día que tengas tu vuelo de vuelta. El coste es de unos 400-450 pesos (unos 5 euros) el trayecto.
Pasaporte
Si eres extranjero, cuando visites el lado brasileño deberás parar en la frontera a sellar tu entrada a Brasil. No olvides llevar ese día el pasaporte.
Clima
Generalmente las Cataratas tienen un clima propiamente tropical, aunque en este caso varían mucho de máximas a mínimas. La mejor época es de marzo a mayo, que por lo general son más agradables y hay menos precipitaciones, pero esto es una lotería. De hecho, yo fui en mayo y me llovió y me hizo un frío totalmente inesperado. Hasta el último momento estuve mirando el tiempo y hacían 29 grados de máxima, y el día que llegué bajaron a 13-16º. Con lo que tuve que guardar los tirantes y comprarme una sudadera en el pueblo.
Entrada al parque
En Latinoamérica generalmente el extranjero paga el doble que el nacional en los parques nacionales. Lo he vivido en Chile, Colombia y ahora también en Argentina. La entrada al parque es de 800 pesos, casi 10 euros.
Y del mismo modo operan en el Parque do Iguaçu, donde el coste es de unos 75 reales, unos 12 euros. Ambos los puedes pagar con tarjeta y es seguro. Por lo tanto, cuenta con esos 22€ para poder ver ambos lados.
Alojamiento
Recomiendo que vayas con el alojamiento ya reservado por aquello de evitar la alta ocupación y precios. Si vas a visitar el parque por tu cuenta trata de que este quede cerca del terminal de buses que es desde donde salen las rutas a ambos parques.
Mi presupuesto era medio y elegí el Hostel Park Iguazú, pequeño pero agradable. Era bastante económico a pesar de tener piscina y desayuno incluido. No pagué más de 300 pesos por noche (3,50€) en una habitación de cuatro camas. El dueño fue muy cercano y amable y me ayudó mucho en mi paso por el hostel.
Norte de Argentina
Aunque no son muchos los que incluirían el norte en una guía sobre qué ver en Argentina en 15 días, para mí fue el destino revelación del viaje. Se trata de una zona más árida y montañosa con tintes de colores que empezamos a ver desde que aterrizamos en la ciudad de Salta.
¿Cómo llegar?
Se puede llegar por tierra o avión, más cómodo cuando no tienes mucho tiempo. No me parecieron caros en absoluto los vuelos nacionales, aún así, Argentina ya tiene su propio Ryanair, con lo que si quieres ahorrarte unos pesos puedes probar combinaciones desde Flybondi, su aerolínea lowcost.
Desde Iguazú, tuve que hacer escala en la capital y se me fue un día entero pero por cuando llegué, me esperaban unos amigos con una espectacular cena en uno de los lugares más emblemáticos de Salta: La casona del Molino, más que una taberna típica, es un lugar de ecuentro con patio al aire libre y con una amplia oferta de platos locales. No faltan además las guitarras e improvisaciones musicales de sus comensales. Muy recomendado.
Salta
Salta es la puerta de entrada a un país completamente distinto. Un país que debemos incluir en la guía sobre qué ver en Argentina en 15 días. Los colores, la artesanía, la lana y el borrego empiezan a tomarse todas mis miradas, recordándome a la folclórica Bolivia. En ella puedes visitar su catedral, la plaza 9 de julio y sus mercados tanto de alimentos -el de San Miguel- como artesanales -El Carmen, donde me volví loca con los ponchos, flautas y demás artículos curiosos.
Desde Salta tienes excursiones de un día que te llevan a sus alrededores como Cafayate, por la conocida ruta de las conchas, donde convergen los paisajes rojos y formaciones rocosas. Sin duda, en esta zona lo importante es el camino, no el destino, así que tómate todo el tiempo del mundo para ir parando y observando.
Jujuy
Provincia situada al extremo noroeste del país, dentro de la región del Norte Grande Argentino, limita al oeste con Chile, al norte con Bolivia y al sur con la ya mencionada Provincia de Salta. Estas influencias fronterizas hacen de este destino un lugar sin igual, donde se entremezclan los maravillosos ecosistemas y colores propios del altiplano sudamericano. Por lo tanto, Jujuy es uno de los destinos imperantes sobre qué ver en Argentina en 15 días.
- Tilcara: desde Salta te lleva un bus por unos 500 pesos (unos 6 euros) que tarda unas 4-5 horas. Aquí los buses de largas distancia suelen tener dos plantas, así que si lo coges con tiempo te recomiendo pillar los asientos de la segunda planta delanteros. Así tendrás vistas de todo el paisaje durante el recorrido. Tilcara se encuentra sobre el lateral este de la quebrada de Humahuaca y es el lugar de llegada para instalarse y conocer sus alrededores.
- Purmamarca: Se encuentra a 27 km de Tilcara y unos 2300 msnm. Para llegar desde el terminal de Tilcara tienes buses con bastante frecuencia y el costo es de unos 40-50 pesos (unos 0,50€). Se trata de un pequeño pueblo a orillas de los cerros cuya actividad económica se centra en el turismo y la artesanía. De hecho, en la plaza principal hay una feria de artesanía muy colorida que hipnotiza a viajeros. Desde este pueblo además se ve el famoso cerro de siete colores, una cadena montañosa que se caracteriza por una belleza particular, derivada de las diferentes tonalidades que le dotan los minerales que la componen.
- Paseo de los colorados: Desde Purmamarca también nace este circuito de unos tres kilómetros perfectamente adecuado para realizar a pie y disfrutar del paseo con un paisaje rojizo, que recuerdan al planeta Marte, e impresionantes formaciones geológicas.
- Salinas grandes: Desde Purmamarca salen las vans que te llevan a las Salinas y que recorren la famosa cuesta de Lipán que ofrece unos paisajes impresionantes y una altura de hasta 4170 msnm. Se trata de las terceras salinas más grandes de Sudamérica, por debajo por supuesto de las majestuosas de Uyuni. Sin duda, es un paisaje que no deja impasible a nadie, las lagunas de azul turquesa se intercalan sobre el impoluto blanco del desierto salino.
- Garganta del Diablo: Se trata de una formación impresionante de paredes de roca que ahuecan el río Huasamayo. Se puede ir caminando desde Tilcara, por un sendero encantador. Tiene algo de pendiente así que llévate agua y protégete del sol durante el recorrido, que puede durar hasta un par de horas, dependiendo del ritmo. Una vez recorrido sus recónditos desfiladeros, en el que puedes jugar con el eco, a final del camino tienes una pequeña cascada, en la que refrescarte y descansar.
- Humahuaca: Es un pueblo cuyo encanto comparte con el resto de localidades que rodean a la quebrada. Situado a unos 3.000 msnm este pintoresco lugar se encuentra también rodeado de estos cordones montañosos tan coloridos y singulares. Es la última localidad importante de la Quebrada de Humahuaca y desde aquí, a unos 24 kilómetros, se puede visitar la majestuosa Serranía del Hornocal o cerro de los 14 colores.
Sin duda, el norte de Argentina es una expedición fabulosa que siempre te dejará la sensación de haber visto poco de todo lo que hay. Por ello, en esta miniguía sobre qué ver en Argentina en 15 días, la pretensión es tomar una muestra pequeña de 3 destinos impresionantes que nos dejen con ganas de volver a seguir explorando este infinito y variopinto país.